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/// ¿Porqué aprender? ///
Artículo creado el 8 de Octubre de 2024 y modificado el 29 de 2024…
Estoy de vuelta en Chile desde el 15 de Noviembre de 2023, esperando el próximo viaje
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Varios artículos nuevos están en curso de redacción y serán publicados dentro de poco.
Muchos links llegan al sitio en francés www.tinctoriales.com, pero no se asuste, se pueden traducir automaticamente.

Ya estoy escribiendo un libro PDF que estará disponible en mis sitios:
«Olla tintorera, este es mi cuento«
Puede ser una ocasión de compartir experiencias

Sin duda va ser un poco difícil ilustrar este artículo, pero voy a intentar ser creativa, mi colección de fotos me ayudará. Aprender puede ser muy bonito, divertido y enriquecedor. Lo vamos a ver. Aprender, también es compartir y eso es lindo, muy lindo. Hasta los animales saben apreciarlo¹.

Ya saben que adquirir conocimientos es un tema que me preocupa. Estoy leyendo sobre el tema de aprender a aprender² y ya quiero compartir con Ustedes lo que aprendí. No soy perfeccionista, pero me gusta comprender lo que hago y por qué lo hago y así eventualmente hacerlo mejor.

No se asusten, no va ser pura teoría, también habrá un ejercicio textil práctico. Supongo que si Usted llegó a este artículo, algo quería aprender.

Aprender, o la gracia del porqué

Se decía que la curiosidad era un defecto feo. Pero, ¿no será más fea la ignorancia? Resulta que aprender plantea muchas preguntas, de porqué, cómo, cuándo, para qué, dónde… Todas estas preguntas amplian el campo de búsqueda y de soluciones a los problemas que uno se plantea. El vocabulario nuevo se acumula y abre nuevas puertas durante la búsqueda y sin duda mejores soluciones.

Un ejemplo, una receta de cocina

Puedo cocinarla tal como viene en el libro o en internet, entendiéndola a mi modo. Si me resulta bien puede ser suficiente. O puedo intentar mejorarla.

O me puedo preguntar:

• que son ciertos ingredientes,
• de donde vienen,
• como son producidos,
• si son muy sanos,
• si no tienen ciertas contraindicacciones,
• si puedo eliminar o añadir unos,
• o como reemplazarlos en caso de no encontrarlos o que no me convengan…

Algunos Chef reconocidos llegan a cultivar su propia huerta. Los Egipcios engordaban «bueyes grasos» especialmente para las elites y lo documentaron. Descubrí un documento sobre esto cuando estaba indagando sobre la domesticación de las ovejas³.

Al fin, la cocina también es historia de química.

O en los textiles

Hace un cierto tiempo compraba las lanas que encontraba y las tejía a crochet. Luego, descubrí unos telares…

• Me informé y coleccioné telares, hasta me fabriqué algunos,
• Quise teñir mis lanas,
• Luego aprendí a hilar lana bruta de oveja.
• Quise saber más sobre la lana para hilarla mejor, busqué commo aprender a esquilar las ovejas,
• Quise conocer otras fibras, llama, alpaca, seda, lino…
• Quise preparar fibras de ortigas, de lúpulo y otras plantas,
• Me interesé en técnicas prehistóricas de tejido: anillado, sprang, trenzas, tablillas, tejer redes…
• Aprendí idiomas y viajé para poder tener acceso a más fuentes,
• Quisiera saber más sobre la domesticación de las ovejas,
• Tengo ganas de escribir un libro, pero quiero hacerlo bien…

Hay una infinidad de temas suplementarios que vinieron a juntarse a estos. Estas búsquedas se complementan. Todo esto me permite ser más autonoma y utilizar mejor lo que está a mi disposición.

¿En qué condiciones aprender?

Si, hay que reunir unas condiciones que favorecen el aprndizaje, pero si no cumple todas, no es razón para no aprender. Hay gente que con muy malas condiciones aprendieron y hasta llegaron muy lejos.

Un poco de atención

Una de las condiciones básicas es prestarle atención a lo que se aprende. Puede significar abstraer de un ambiente ruidoso.

Pero estar en condiciones silenciosas, o simplemente no estresantes, no es suficiente. Hay que desarrollar la atención y dedicarla a lo que se aprende, no a las notificaciones en el celular, siempre pueden esperar un rato.

También hay que estar atento a remarcas que pueden pasar desapercibidas dentro de una conversación, así aprendí que había un buen sentido para tomar el pelo o la lana cuando se hila.

Cuando se lee un libro, no se debe saltar las notas de pie de páginas, pueden contener detalles muy importantes. Por algo, los escritores se dan la pena de redactarlas.

Tener ganas

Las ganas son imprescindibles. Sin ganas, cuesta dedicar atención.

Me parece que uno aprende primero para uno mismo, después eventualmente para otra persona. Pero, el primer beneficiario del aprendizaje es uno mismo. Cuando uno tiene ganas, el esfuerzo cuesta mucho menor.

No despreciar al que enseña

Nunca ha sido bueno despreciar, pero es corriente, tan corriente que a veces uno no se da cuenta. Hay que saber dejar de lado los prejuicios, sólo pueden entorpecer el aprendizaje.

Él que me enseñó a tejer redes, en Brasil, era un pescador sordo-mudo y se las arregló muy bien para enseñarnos a tejer las redes desde el principio. Le soy muy agradecida.

En lo que toca a las artesanías, no todo es limpio.

Hasta la joyería es un trabajo muy cochino e insalubre.

Hasta hay un pergamino egipcio que se llama algo como «La sátira de los oficios«, todavía no lo encuentro, donde se burlan de los defectos de cada oficio.

No despreciar lo que es enseñado

Por ejemplo, saber lavar la lana es indispensable antes de teñirla, sino el teñido no puede fijarse bien. Y eso, muchos vendedores de lana, hasta experimentados, no lo saben o no quieren saberlo, lo que es peor.

Suelo detallar bastante este tema aunque sea tiedoso porque del buen lavado y del buen enjuagado poco relucientes depende el resultado final. Voy a tener que dedicarle un artículo a este tema despreciado.

Cada materia tiene su base, sus ejercicios, sus detalles invisibles… estos no aparecen en la foto Instagram. Hasta la foto Instagram tiene su preparación para que el algoritmo la retenga, tiene que calzar con un molde que cambia cada cierto tiempo…

Cuando vivía en Iquique, tenía un vecino amigo que era músico, tocaba el charango, pasaba horas y horas moviendo los dedos en silencio, para estrenarse. Esto no se ve cuando se escucha, pero no creo que se escucharía tan bien si no lo hiciera. Esto hace parte de su aprentizaje y de su práctica diaria.

En la pelicula de Madagascar, «Ady Gasy» uno de los músicos muestra como se fabrica un instrumento especial para estrenarse sin molestar a los vecinos.

No despreciarse a si mismo

Todos podemos aprender, hasta los animales aprenden, sino no sobreviven.

Hay que saber luchar contra la incompetencia aprendida. Es una dañina forma de despreciarse a sí mismo. Hay creencias dañinas que hay que abandonar. Una de ellas es pensar que uno/a no es bueno para algo. Todos empezaron por aprender y practicar. Hay que insistir y no abandonar.

Por ejemplo, el hilado

Mis primeros hilados eran bien toscos y gruesos. Un campesino de Longotoma me regaló unos sacos de lana de oveja a cambio de un poncho. Me costó bastante hilarla.

Con bastante práctica, logré obtener esto 10 años después y puedo lograr más fino aún. La práctica también enseña.

Bien dormir y comer correctamente

Esto, también es respetarse, quererse.

Un buen descanso es primordial para una buena concentración y una buena memorización. Mientrás que uno duerme, no se pierde tiempo, el cerebro trabaja, pués no lo molestemos en sus tareas.

Se considera que el cerebro consume el 20% de la alimentación absorbida, ahí se trata de darle calidad y no cantidad. No es un motor que sólo quema bencina. Necesita una gran variedad de elementos: proteinas, vitaminas, minerales, oligoelementos… Esto no se encuentra en la comida chatarra.

No hay pregunta tonta

Una pregunta «tonta» puede señalar un problema en la enseñanza, un problema de vocabulario, una confusión, todo eso tiene que solucionarse…

Pero, también puede abrir campos de búsqueda innovadores.

Presentación en el Isend 2017, en Antananarivo, Madagascar sobre los cursos que dí en Santa Fe, Argentina.

¿Porqué no? Lo hicimos en Santa Fe, Argentina. El Centro Cultural «La Redonda» es un lugar muy especial.

¿Qué aprender?

No hay ciencia fea o inútil

Todo puede ser un buen tema. Hasta la mierda, y no es chiste. Es un tema que merece atención. En la ciudad de Turku, Finlandia, le dedicaron un museo.

El museo donde habían textiles estaba cerrado, y yo tenía tiempo, así que lo visité. Es un pequeño museo bien educativo, con unas reflexiones sobre lo que hacemos con nuestros desechos. No perdí mi tiempo visitándolo.

La mayoría de los ejemplos son fotos. También, hay vitrinas con animales embalsamados que se disimulan en la vegetación.

En efecto, para muestros ancestros cazadores-recolectores, las heces les indicaban la presencia de tal o tal animal que no siempre deja otras huellas. Les era muy útil aprender a reconocerlas.

En la mina de sal de Hallstatt, en Austria, encontraron escrementos humanos de más de 3000 años, fueron estudiadas con muchísimo interés ya que dan muchas informaciones sobre la alimentación, el microbioma y la salud de los mineros de la Edad del Bronce.

Este tipo de tema interesa en la actualidad más de un equipo de médicos y biologos por el mundo, desarollando nuevos modos de sanarnos.

El uso de los escrementos fue muy útil⁴ en muchos dominios (agricultura, curtiembre, limpieza, teñido…) y reaparece en los textos históricos como el monstruo del Loch Ness, para volver a ser olvidado.

No quebro ningún tabú

No se preocupe. Todavía no pienso usar heces en mis trabajos.

Simplemente, trabajo con textiles y el campo es muy amplio. Las soluciones son muy variadas y combinables. Sigo con curiosidad y siempre encuentro algo nuevo que aprender.

Decidirse a aprender

Hay que tomar la decisión, buscarse las herramientas y lanzarse. Proyectos puede haber muchos, sólo cuenta lo realizado. Siempre es tiempo de añadir más herramientas si faltan algunas. Un proyecto cualquiera se hace paso a paso, pero hay que dar el primer paso y luego no pararse.

Y saber mejor ¿Acaso, no será bueno?

Un mejor conocimiento, sólo puede fortalecer la práctica. Incluso mejorarla eliminando etapas inútiles o al contrario añadiendo gestos secretos que no suelen documentar las formaciones básicas.

Esto supone idas y vueltas entre la teoría y la práctica para arreglar puntos que pueden parecer problemáticos y adaptarse a condiciones reales locales.

Más de una vez, tuve que adaptar mis conocimientos teóricos «europeos» a condiciones locales chilenas. Por ejemplo, falta de piedra alumbre para mordentar la lana.

Las opciones son varías, mezclando las plantas, aprovechando las plantas con taninos y las plantas que acumulan el alumimio.

¿Aprender sólo o compartiendo?

Un proverbio africano dice algo como «Él que va sólo, va más rápido. Pero, en conjunto se va más lejos.«

Para adquirir las bases de una materia, el aprendizaje solitario podría ser privilegiado. Pero siempre es bueno compartir con otros para completar ciertas nociones.

Quería que probemos una técnica de reserva usando arcilla blanca que enseña Michel Garcia. Entre los que participaban al curso había varias ceramistas. Una de ellas, me dijo que tenía una arcilla especial española roja y quería probarlo. Lo hicimos. El resultado fue interesante.

A medida que uno va adelantando en el estudio de una materia, se va avanzando más lento, y compartir informaciones y preguntas se hace cada vez más indispensable.

Aprender usando los errores

Los errores son facilitadores del aprendizaje. Aprendiendo sólo, cuesta más ver los errores y corre el riesgo de desviarse más profundamente. Al contrario, descubrir rápidamente sus errores es muy útil.

La práctica ayuda mucho para encontrar y solucionar los errores. Obliga a buscar más y esto resfuerza el aprendizaje.

Hay toda una pedagogía basada sobre el error⁵.

Más ayudas para aprender

Tomar notas

Puede ser muy útil, es bueno tener siempre a la mano un cuadernito. Yo uso mucho un programita en el computador, así siempre las tengo a la mano cuando trabajo.

Hacer fichas

Puede ser una buena solución, todavía no tuve la paciencia de hacerlo. Estoy pensando en una base de datos en el computador, pero igual es tiempo.

Sacar fotos

Eso sí, lo práctico y luego paso también bastante tiempo para clasificarlas para que esten más facílmente a la mano cuando preparo un artículo. Al reordenar recientemente mi colección de fotos me dí cuenta de cuanto había aprendido en los últimos años.

Revisar

Intentar reexplicar con otras palabras, otras metaforas lo que aprendió. No está prohibido mejorar la explicación o la técnica según el caso.

Esta solución es muy eficiente ya que reactualiza lo aprendido y provoca nuevas preguntas.

En el caso de la foto, no teníamos filtro de café, probamos con una tela sintética, no fue suficiente. Luego, probamos con una de estas mascarillas, recuerdos de un cierto virus. ¡Era tan hermética que ni el agua pasaba!

Divertirse al descubrir

Divertirse al aprender favorece la memorización, gracias a un aporte emocional.

A toda edad

Cuando tipeaba textos para ganarme la vida, hace más de 30 años, me tocó tipear partes de una tesis de una odontóloga sobre las mutilaciones dentales y su historia. La autora del documento tenía más de 90 años y pasaba su doctorado en antropología. Describía encuentro arqueológicos sorprendentes, tradiciones y leyendas del mundo entero. El texto era tan interesante que me leí hasta las partes que ya habían sido tipeadas por otra persona antes.

Aprendí muchísimo.

Ahora que tengo 63 años, sigo aprendiendo todos los días.

La memoria se cultiva

Es como un bello jardín, necesita un poco de cuidado y de cariño. No hay que despreciarla, es una herramienta potente, más potente de que uno se lo imagina. Sólo hay que usarla, no se desgasta, al contrario se mejora.

Para eso hay que prácticar y seguir practicando y así encontrar otras soluciones.

Aquí se necesita de nuevo, la atención, la concentración, el descanso y la buena nutrición.

También es necesario:

• deseo de aprender,
• comprensión de lo se aprende, partir de la base si necesario,
• estructurar, esquematizar, con listas o dibujos según su gusto, subrayar, anotar,
• aplicar lo más temprano posible lo aprendido,
• practicar cuanto más largamente,
• lo que se olvido después de practicar, vuelve cuando uno lo necesita,
• revisar lo aprendido, el mejor modo de revisar es compartirlo, porque obliga a transcribirlo a su modo,
• saber hacer pausas al aprender y al memorizar,
• compartir sus experiencias…

No se asuste por lo largo de la lista. Es fácil. Luego se hace costumbre. Todos podemos hacerlo. En «Ady Gasy«⁶, la mujer campesina, que vemos al principio batiendo el arroz, se ve encargada de toda la presentación de un espectáculo musical. Experiencia novedosa para ella, se ve como cumple con esta tarea que es un verdadero desafío para ella, tomándo en cuenta que este papel en su cultura, suele ser reservado a los hombres.

Aprender con fuentes distintas

Todos los caminos llevan a Roma. Ya hablé un poco de este tema en un artículo precedente. Los libros y los documentales son fuentes privilegiadas, pero no son las únicas.

La misma ciencia no se alumbra del mismo modo en el mundo, quedando con el mismo el mismo tema de los teñidos naturales. Los libros que pude consultar en la Biblioteca de Goteborg en Suecia son muy distintos de los libros franceses o españoles de mi biblioteca, los libros alemanes e ingleses también son diferentes. Tratan bien de la misma materia, las plantas siguen más o menos las mismas, casí internacionales, los mordientes son los mismos, las recetas no cambian… Pero, los puntos de vista y las ilustraciones no son los mismos.

El elogio

«Al enterarse que sus antiguos pupilos le elogiaban, comentó el Señor K.:
– Cuando los discípulos ya hace tiempo que olvidaron los errores de su maestro, éste aún los recuerda.»

Bertold Brecht, «Historias de Almanaque«

Saber observar

Observar con atención los gestos de un artesano, es un muy buen modo de aprender. A veces, usan herramientas sorprendentes y los resultados lo son más aun. Si posible, intentar rehacer, esto graba mejor lo aprendido.

Cuando enseño, por ejemplo, el telar María, insisto para que los alumnos hagan la mayor parte del montaje de la urdiembre y que luego tejan. También, les recomiendo que saquen muchas fotos y video.

Experimentar

Experimentando se aprende mucho. Hay bastante diferencias entre lo que uno cree haber comprendido y lo que uno produce. Ahí se ve la importancia de los detalles, de los gestos, de las texturas, de los colores, de los olores, del tacto y del gusto, en cierto casos de los sonidos…

Los herreros y los que trabajan el vidrio prestan mucha atención a la variante del rojo del material que trabajan. Esto les da la temperatura y les indica si hay que recalentar la pieza o no para seguir trabajándola.

Los antiguos tintoreros con indigo no conocían las cintas pH para conocer la alcalinidad de su baño, lo proban al gusto y así sabían si estaba listo o no y corregirlo si necesario⁷.

Por alguna parte, oí decir que no se puede aprender a nadar por correspondencia.

Aprender para enseñar mejor

Profundizar los conocimientos del dominio en que uno trabaja permite enseñarlo mejor. Claro que nunca se puede contestar a todas las preguntas. Pero, contestar a las preguntas más importantes y seguir indagando las zonas más inseguras es bueno.

Ejercicio práctico

Les propongo un modelo sencillo, Usted lo puede mejorar a su gusto.

Decidí inspirarme de esta foto para crear el modelo.

Aprender a hacer una bolsita-colgante de cuero y algodón

No voy a usar anillos de metal, generalmente se oxidan muy rápido. La cadenita puede ser una trenza o un cordelito tejido con Lucet. Escogí hacer una trenza de algodón, relativamente ancha, me dí cuenta durante mis viajes que cuanto más fina es una correa, cuanto más daña la piel. Más encima, al uso una trenza se estira y se adelgaza.

Materiales

• Dos o tres pedacitos de cuero, de la forma que le guste. Si no le gusta el cuero, se puede hacer con pedazo de madera, de cartón piedra o de plástico un poco duro, pede ser la ocasión de reciclar…
• Retazos de lana, hilo o cuero
• Perlas, si les da la gana

Herramientas

• Una aguja de coser lana
• Una herramienta para hacer los hoyos (punzón, saca-bocado, clavo y martillo…)
• Un poco de lija, en caso que los bordes de cuero sean visibles.

Paso a paso

Hice, mi bolsita doble, entonces tomé tres pedazos de cuero, uno de cuero de salmón, uno de cuero bastante grueso, uno de pergamino. Los recorté según las misma forma.

Luego, pegué estos pedacitos en los bordes para que no se muevan cuando se hacen los hoyos.

Hice los hoyitos.

Entonces, cosí tejiendo los pedacitos de cuero con anillado.

El punto de anillado

Para mostrarle como tejer el punto que empleé, preparé un papel con hoyitos para figurar el cuero de la bolsita.

Se abre el papel y tenemos una serie de hoyos que van a servir de base para el anillado. Preparé una aguja con una lana gruesa para que se vea mejor.

Quería ponerles una galería para que parezca más liviano, pero el sistema me ponía las leyenda sobre la foto y reducía las fotos para poner 3 en linea, no quiero imaginar el resultado en un teléfono portable.

Para enseñarles el punto, tejí sólo un paquete de puntos en cada hoyo. En la bolsita, puse dos paquetes de puntos en cada hoyo.

¿Ya lo hizo?

¡Qué bueno! Estoy curiosa de ver como le resultó. Mándeme una fotito por Whatsapp. Espero que les haya sido útil.

Conclusión – Aprender es ampliar su mundo

Siempre habrá alguién curioso de aprender lo que Usted sabe, es el momento de compartirlo, aunque no lo haya visto como interesante hasta ahora.

Usted también puede tener su aporte a este artículo, así que estoy esperando sus comentarios a mi whatsapp. Muchas gracias por adelanto.

Estoy curiosa de tantas cosas que me falta tiempo para aprender todo lo quiero saber.

Es bueno saber en los tiempos artificiales en que vivimos, porque lo sabido no hay que preguntarselo a una IA que le puede contar cualquier cuento verosimil pero no real. Las IA sólo aprenden de nosotros y no tienen dicernimiento.

¿Necesita un cursito o un intercambio?

Basta con contactarme, mis técnicas son muy relajantes, justamente lo que hace falta en este mundo estresado y suele ser una experiencia única.. Es mucho mejor compartir en vivo, sin la intermediación de unas pantallas que le quitan el sabor a la vida.

Si tienen alguna pregunta, mi whatsapp los está esperando.

Post-Scriptum

Como lo pueden ver me gustaría hacer un aporte útil a proyectos de reconstitución de técnicas prehistóricas, de arqueología experimental, de la antigüedad o medievales.

1. «Les origines animales de la culture«, Lestel, Champs, Flammarion ↩︎
2. «Apprendre à apprendre«, Giordan André; Saltet Jérôme, Éditions: J’ai lu, 2015 ou «Apprendre vite et bien«, Dr. Barbara Oakley & Olav Schewe, Éditions First, 2021 (más orientado hacia las neurociencias). Leí estos dos, pero seguro que hay parecidos en castellano. ↩︎
3. «Les lieux d’élevage du bétail (mḏ.t, jhȝy et sȝ-pr) et leur administration entre l’Ancien et le Nouvel Empire«, Adeline Bats ↩︎
4. Hasta Terry Pratchett le dedicó una novela entera «», y varias otras le hacen referencia. Aunque sea de fantasía este libro está basado sobre información histórica, y justo ahora escucho una emisión de France Culture que habla del problema de la limpieza de las ciudades a través de los tiempos ↩︎
5. «L’erreur, un outil pour einseigner», Jean-Pierre, Astolfi, ESF Éditeur ↩︎
6. «Ady Gasy«, pelicula de Lova Nantenaina ↩︎
7. «Le monde des teintures naturelles«, Dominique Cardon ↩︎